Vámonos al lavadero

Aquí me tienen para comentarles algunas de las cosas que han ocurrido en las más recientes semanas y que han sido motivo alegrías y también de algunos desencantos.

La primera y más reciente que tenemos es que por fin, el siete veces campeón del mundo, Michael Shcumacher, ha salido del coma en que lo pusieron los médicos para evitar daños más severos a su salud tras el accidente de esquí que sufrió el pasado 29 de diciembre de 2013.

En los pasados meses mucho se dijo y se desmintió sobre su mejoría, pero después de confirmar que ya había sido trasladado del hospital de Grenoble a una instalación especializada para su rehabilitación, podemos dar por sentado que ésta es la buena, y que ahora sí está en camino a la recuperación.

Por supuesto que es muy aventurado dar un pronóstico de lo que ocurrirá con él porque se desconoce el grado de los daños que pudo haberle dejado el accidente, pero sigo teniendo confianza en que así como su condición de deportista de alto rendimiento le pudo haber servido para sobrevivir y salir adelante de la etapa más complicada, con las atenciones y el cuidado de su familia eventualmente terminará de recuperarse. Tal vez no al nivel de volver a practicar algún deporte, pero esperemos que sea a un punto que le permita gozar de su vida y familia en buenas condiciones.

Claro que la noticia fue recibida con gran alegría por parte de colegas y admiradores, pero también trascendió a otros ámbitos como el del fútbol, donde jugadores de la selección alemana mostraron su alegría en redes sociales por la recuperación de su coterráneo que vino a ocurrir el mismo día en que debutaron y ganaron su primer encuentro contra Portugal en la Copa del Mundo Brasil 2014.

Pasando a otras cosas, ya se confirmó que Adrian Newey no deja Red Bull para irse ni con Ferrari ni con McLaren (como se llegó a especular hace algunos meses). El diseñador de diez autos ganadores del campeonato de constructores (solo contando los de Fórmula Uno) ha anunciado que se queda con la escudería Austriaca por así convenir a sus intereses familiares y personales, pero que se despega un poco de la máxima categoría para meterse a asesorar en las muchas otras áreas donde Red Bull tiene proyectos de desarrollo tecnológico. 

Esto era algo de esperarse porque es claro que Red Bull no piensa dejar disponible a su diseñador estrella para que otras escuderías retomen gracias al talento y experiencia de Newey, la posibilidad de volver a los más altos niveles de competitividad que ellos han tenido en los últimos cuatro años.

Podríamos decir que el momento por el que está pasando la escudería podría ser un motivo para dejar ir al ingeniero y diseñador británico, pero con los resultados que está obteniendo Daniel Ricciardo, es claro que no todos los problemas descansan en un diseño que no está tan bien adaptado a las nuevas condiciones de un Fórmula Uno como lo señaló a principio de la temporada el tetra campeón, Sebastian Vettel, sino que hay otros factores que evidentemente pesan más.

Y ya que hablamos de Vettel y Red Bull, les platicaré que hace unos días el doctor Helmut Marko, consejero deportivo de Red Bull y gracias a quien la escudería Austríaca pudo fichar al ahora múltiple campeón del mundo, declaró que habló con Vettel sobre su desempeño y sobre todo su actitud desde el inicio de la temporada. Aquí su declaración:  "Le he dicho que aumente su nivel de juego. Hay cincuenta ingenieros que trabajan en el motor, y no pueden hacer milagros. Por eso, le he dicho que era un piloto top y, por ello, le tocaba a él recuperarse, y eso debía hacer. Sebastian es un cuatro veces Campeón del Mundo: si no puede configurar el coche a su estilo, lo más fácil es que se adapte él a su coche. Ha de tener agallas". En otras declaraciones, Marko también señaló: "Sebastian se estaba quejando sobre tener un coche tan malo. Además, piensa que la forma en la que la F1 está funcionando no es la adecuada; los coches deberían ser monstruos y no tendrían que pilotarse tan fácilmente. Con todos esos problemas, quizás no estaba tan comprometido como debería de haber estado, pero eso ha cambiado".

Si se preguntan por qué tanta agresividad por parte del mentor del cuatro veces campeón del mundo, la gota que derramó el vaso fue una declaración que hizo el chico maravilla cuando se le preguntó sobre la expectativa de Red Bull en el circuito de casa, a lo que éste dijo que le daba pena decirlo, pero que el auto era un pepino en las rectas, carente de potencia. 

Y aquí yo me pregunto si la Fórmula Uno es, con todas las modificaciones que ha sufrido de un año a la fecha, lo suficientemente competitiva como para poner retos muy altos para pilotos que en otras circunstancias han sido por demás brillantes, como es el caso del propio Vettel y también de otros como Fernando Alonso y Kimi Räikkönen a quienes ésta Fórmula Uno no les ha venido bien, pero que a pilotos de la categoría de Lewis Hamilton, también campeón del mundo (con todo y sus dos abandonos en la temporada), parece sentarle bien. ¿Es cuestión de talento o es cuestión de trabajo? ¿Es cuestión de tener un auto confiable y además eficiente? ¿Cuál es la fórmula que les está rindiendo frutos a Hamilton, Rosberg y Ricciardo? ¿Es la combinación piloto-auto o cuestión de buena suerte en un buen momento?

Preguntas todas difíciles de contestar porque en Canadá ya vimos que Mercedes no es intocable y que Red Bull no está derrotado, pero también vimos que aunque se tenga un piloto con talento y experiencia, si no se tiene el auto, poco o nada se puede hacer. 

Personalmente creo que el problema de Vettel es que su expectativa para nada se alineó con la realidad de su entorno y que en verdad un cambio de actitud le vendría bien y hasta lo ayudaría a retomar su sitio privilegiado dentro de la Fórmula Uno. Si bien el talento de Ricciardo es extraordinario, el australiano ha sabido sortear los obstáculos que se le han presentado con una buena disposición y mucho trabajo. No digo que ésa sea la fórmula que debe seguir Sebastian Vettel, pero si cambiara un poco su forma de ver las cosas, la vida lo volvería a colocar en la posición que su talento ha ganado. Ahora nos queda claro que para demostrar que se es un buen piloto, no nada más se deben cosechar títulos del mundo.  

Con Ferrari es evidente que el problema es el equipo en conjunto y que les pesa mucho más en sus planes de diseño y desarrollo de un auto competitivo todo lo que el vehículo tiene que contemplar para estar dentro de los requerimientos de la nueva era de la máxima categoría, pero es un hecho que si otros lo han podido hacer y no sólo por cumplir, sino que han hecho un auto que parece hasta cierto punto inalcanzable, la escudería de Maranello, con todo su dinero e infraestructura tecnológica debería poder entregar el mismo producto confiable que ha entregado Mercedes este año.

Y bueno, tan serio es el problema de Ferrari que no solo han renunciado a cualquier expectativa dentro de la temporada 2014, sino que también han amenazado con abandonar la máxima categoría. ¿Alguno de ustedes se puede imaginar la Fórmula Uno sin Ferrari?

Mientras Fernando Alonso muy felizmente le dio el banderazo de salida a las 24 horas de Le Mans este fin de semana pasado, Luca di Montezemolo arremetió contra la máxima categoría diciendo que: "La F1 no funciona. Se viene abajo porque la FIA ha obligado a los espectadores a que vean este deporte por la emoción que ofrece y no para ver quién es el más eficiente". Y estas no fueron palabras dichas al aire, sino que se las dijo nada menos y nada más que al Wall Street Journal en relación a las nuevas reglas que limitan el consumo de gasolina.

Si esto les parece poco, también agregó: "Y, encima, no podemos tocar el motor durante el transcurso de la temporada. A nadie le gusta el ruido que hace ahora. Los aficionados quieren diversión, no quieren ver ahorros de combustible o cómo se gestionan los neumáticos. Quieren ver a los pilotos pisando hasta el fondo. Es un deporte, sí, pero también es un espectáculo", añadió. 

Ahora, no crean que la prensa se sacó de la manga la amenaza de abandonar la Fórmula Uno, en sus declaraciones al Wall Street Journal también aseguró que: "De cara a 2020, no podremos estar en el Mundial de Resistencia y en la F1. No es posible".

¿Comienza entonces la cuenta regresiva de Ferrari en la Fórmula Uno? ¡Que alguien resucite a Enzo Ferrari porque lo necesitamos de inmediato!

Por supuesto que la Scudería lanzó un comunicado oficial para contener un poco el fuego que antes encendió su presidente, pero no sabemos todavía si este bomberazo será suficiente para calmar los ánimos o si será el motivo por el que Alonso y Räikkönen busquen más adelante mejores horizontes en otra escudería o de plano en otra categoría ya que a lo único que aspiran los dos campeones del mundo es a superar su compañero de equipo.

"Algunas informaciones publicadas en la prensa sugieren que Ferrari querría abandonar la F1 para concentrarse en Le Mans y el Mundial de Resistencia. Esto es acortar lo que dijo el presidente Luca di Montezemolo".

"Él solamente reiteró que la F1 necesitaba evolucionar, renovarse, además de admitir que había una atracción única por las 24 horas de Le Mans. Señalar que, a partir de 2020, Ferrari abandonará la F1 para concentrarse solamente en Le Mans y el Mundial de Resistencia es llevar sus palabras al extremo. A decir verdad, nada impide a Ferrari competir en ambas disciplinas, por lo que esto solamente son puros rumores", acabó el comunicado.

Sí, es verdad que son solo rumores pero no olvidemos que un rumor es algo que se tiene dos posibles resultados: que se deseche o que se vuelva una realidad. ¿Cuál de ellas es la que verá Ferrari al principio de la siguiente década?

Pero bueno, pasando a otras cosas les contaré que después de los dimes y diretes entre Rob Smedley y Force India en donde el jefe de rendimiento del equipo Williams aseguró que fue un acto irresponsable por parte de Force India dejar el auto de Sergio Pérez en pista sabiendo de los problemas "terminales" que sufría, y que de haber actuado con prudencia el accidente entre él y Massa se habría evitado, el cofundador de Williams, Patrick Head cree que Smedley se pasó de la raya con sus comentarios, aunque también dijo entender la raíz de la crítica. 

En Sky Sports Patrick Head dijo: "Sin duda, fue una buena oportunidad y, cualquier equipo que empiece cuarto o quinto en la parrilla y termine finalmente séptimo, va a estar decepcionado. Vi que Rob Smedley, el jefe de operaciones, había criticado a Foce India, algo que creo que estuvo un poco fuera de lugar. Pero creo que se quedó totalmente decepcionado tras la carrera, al igual que imagino que ellos también (refiriéndose a Force India)".

Si bien la situación entre las dos escuderías no se relaja con estas declaraciones, por lo menos sí nos deja un sabor de boca distinto al ver que todavía hay personas sensatas y ecuánimes en el mundo. ¿O no?

Y ya con esta me despido porque como es mi costumbre, me he alargado en la redacción de esta entrada. Hay más cosas por comentar, como es el rumor de que la escudería Hass podría tener entre sus filas a la piloto Danica Patrick, pero como ella ha dicho que no sabe nada al respecto, pues entonces lo dejaremos ahí para el momento en que se confirme o de plano se desmienta esta posibilidad.

Nos vemos pronto.

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